Prometeo LSD Abarth Grande Punto M32 Caja de Cambios

Los coches deportivos con tracción delantera pueden sufrir baja tracción, debido a la alta descarga de par en los neumáticos.

Esta situación suele darse en la salida de una curva, donde la rueda interior queda parcialmente descargada por el peso actual debido al accionamiento de la carga centrífuga; por lo que una rueda es capaz de descargar al suelo una cantidad de par mucho menor que la otra.

Téngase en cuenta que un diferencial abierto (=estándar) se caracteriza porque siempre divide el par en dos partes idénticas, por lo que el par máximo que se puede descargar al suelo está condicionado por el agarre de la rueda menos cargada.

Muchos coches modernos suelen estar equipados con un dispositivo electrónico llamado TTC, que simula un diferencial autoblocante. Cuando una rueda motriz pierde agarre, la ECU envía un impulso eléctrico a la pinza de freno de la rueda que patina; el par negativo que se añade a la rueda permite engañar al diferencial abierto, lo que lleva una cantidad de par idéntica a la rueda con mayor agarre.

El TTC es un sistema importante y seguro, que permite un buen control del vehículo, pero – insistimos – no es un diferencial autoblocante y no garantiza las prestaciones que sólo un diferencial autoblocante bien hecho puede dar.

Si sueles conducir tu coche en circuitos o te molesta el desagradable deslizamiento de las ruedas internas en cada salida brusca de curva, un auténtico diferencial autoblocante es tu solución.

El diferencial autoblocante Prometeo con engranajes helicoidales (también llamado "Limited Slip Differential"), instalado en un coche con un par motor de 320 kgm (~3200 Nm), permite repartir de forma asimétrica el par motor procedente del motor. Esto significa que la rueda con más agarre obtendrá un par motor extra respecto a la otra rueda (más descargada). El índice de bloqueo del diferencial Prometeo en marcha es de aproximadamente el 35%. Hemos preferido no superar este índice porque los coches en los que se puede instalar el diferencial autoblocante siguen siendo coches de carretera.

El diferencial de engranajes helicoidales funciona de forma muy progresiva y no genera efectos desagradables en conducción normal. El índice de bloqueo en modo freno-motor está limitado al 25%, para no afectar la frenada ni el paso por curva.

Es muy difícil explicar con palabras el efecto conseguido, pero la sensación que se experimenta cuando abres el acelerador tras el vértice de una curva y no sientes que el tren delantero se va por la tangente sino que lleva al interior, es algo desconocido para un diferencial abierto de tracción delantera.
¿Cómo funciona un diferencial autoblocante?
En primer lugar, considere el diferencial abierto (=estándar) en la tracción delantera.

El diferencial es un dispositivo capaz de compartir el par procedente de la caja de cambios en dos mitades exactamente idénticas, independientemente de la diferencia de velocidad de las ruedas en el mismo eje.
Entonces, como se puede ver en la imagen, dichos 100 (unidades arbitrarias) de torque que llega al diferencial, cada rueda recibirá un torque de 50.

Hay otro factor importante que hay que tener en cuenta: el agarre de los neumáticos al suelo. El par puede descargarse en el suelo hasta el límite de agarre de la rueda; este límite es proporcional a la tasa de carga que actúa sobre la rueda y al factor de agarre, que depende estrictamente de las condiciones del suelo, así como, por supuesto, de los neumáticos.

Así, si una de las ruedas de la tracción delantera pasa por una zona de menor adherencia (es decir, asfalto resbaladizo), o va poco cargada al circular por una curva rápida (rueda interna), el par que esta rueda puede descargar al suelo se reduce porque alcanza su límite de deslizamiento. Debido a la característica diferencial de serie antes mencionada (mecanismo que reparte a partes iguales el par entrante), el mismo valor de par (bajo) irá a parar a la otra rueda, aunque tenga un buen agarre al suelo.

Como se puede ver en la imagen anterior, dicho límite de deslizamiento de la rueda delantera izquierda es de 20, la rueda derecha no puede hacer nada mejor que descargar 20 al suelo. Por lo tanto, la tracción total de la transmisión delantera se reduce a 40, significativamente menos que los 100 del ejemplo anterior.

Si instalamos el diferencial autoblocante Prometeo quitando el de serie, se mejora la tracción. Veamos cómo y cuánto.

En primer lugar, en condiciones de agarre bueno y uniforme, el diferencial autoblocante se comporta como un diferencial abierto, como se muestra en la siguiente imagen.

Si una rueda pierde agarre, el diferencial autoblocante transmite un par adicional a la otra rueda.
Por lo tanto, el par de toda la transmisión delantera descargado al suelo es mayor que el par descargado por un diferencial abierto.
La siguiente imagen es muy explicativa del modo de trabajo.

El índice de bloqueo del 35% es el mejor compromiso encontrado tras numerosas pruebas realizadas en diferentes condiciones. No olvidemos que un índice de bloqueo excesivo haría que el coche subvirara demasiado en condiciones normales de conducción, con los consiguientes problemas para el conductor. Por otro lado, un índice de bloqueo demasiado bajo habría reducido las ventajas del diferencial autoblocante, haciéndolo sustancialmente inútil.